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Estadio olímpico Emah, ciudad de Sheol
3 de septiembre de 2008
JACINTO – ¿Pero es muy grave?
OLGA – No… No te… No te quiero asustar, pero… estaba… estaba como loca. No paraba de golpearla… A mi me… me dio un empujón mientras intentaba ayudarla, y me di un golpe en la cabeza, y… perdí la conciencia un rato. Yo no… Cuando… Lo siento… De verdad…
JACINTO – Por el amor de Dios, Olga, haz el favor de tranquilizarte. ¿Cómo está tu madre?
Olga se apartó un segundo el terminal móvil de la oreja, sobre la que se encontraba el vendaje que cubría la herida que tenía el cuero cabelludo, y echó un vistazo a la camilla sobre la que descansaba Agustina. Conservaba la consciencia, aunque la habían sedado fuertemente. A su lado habían otras tres camillas, pero sus ocupantes no habían tenido tanta suerte como ella. De una de las sábanas que cubrían aquellos cadáveres aún se podía ver claramente cómo sobresalía una protuberancia que correspondía a la flecha que había acabado con la vida de aquella anciana desnortada.
OLGA – Dicen que está fuera de peligro, pero que… tienen que hacerle unas pruebas, porque esa mujer…
Olga tragó saliva, incapaz de creer lo que estaba a punto de decir.
OLGA – … le mordió, y… dicen que puede que le haya pegado algo. A mi me da miedo que…
JACINTO – No se hable más, Olga. Voy para ahí ahora mismo.
OLGA – ¿Pero… vas a venir con el trailer?
JACINTO – Lo dejaré en la cochera ahí en Midbar y vendré a buscaros en el coche. A penas me desviaré un par de kilómetros, y así podré llegar más rápido.
OLGA – Pero todavía no has hecho la entrega…
JACINTO – Que le den por culo a la entrega, Olga. Esto es más importante. ¿Tu hermano cómo está? ¿Está ahí contigo?
OLGA – Sí… Está… está bien. Bastante asustado, pero… él está bien.
JACINTO – Vale. Llegaré ahí cuanto antes. Si salís antes de que llegue, acuérdate de decirme a qué hospital os han llevado. ¿De acuerdo? No os separéis de tu madre.
OLGA – Sí, papa.
JACINTO – Hasta luego, cariño. Ya… ya verás que no es nada.
Olga tragó saliva, y presionó el botón con el icono de un auricular de color rojo. No había tenido valor de contarle a su padre el motivo por el que aquella anciana había dejado de agredir a su madre. Ella misma aún no daba crédito, ni tampoco su hermano, a juzgar por la mirada perdida que le acompañaba y su harto antinatural parquedad en palabras. Esa mujer no había sido la única persona que había perdido la vida durante la final del campeonato, pero sí era la única cuyo asesino había sido delatado por más de una docena de testigos. La joven de la coleta castaña y los pendientes en forma de perla se acercó al agente de policía que custodiaba a su hermano, y éste hizo un gesto de impaciencia al verla acercarse.
AGENTE SAÑUDO – ¿Ya has hablado con vuestro padre?
OLGA – Sí…
AGENTE SAÑUDO – ¿Y qué te ha dicho? ¿Puede venir?
OLGA – Sí… De aquí… una hora, como mucho, él…
AGENTE SAÑUDO – ¿Una hora? No. No podemos esperar tanto. ¿Tú sabes la de faena que tenemos? Parece que media ciudad se haya puesto de acuerdo para volverse loca al mismo tiempo. Lo siento, pero me tengo que llevar a tu hermano ahora.
OLGA – Pero, si sólo…
AGENTE SAÑUDO – ¿No te puedes quedar tú con él? En el coche hay…
OLGA – Pero es que mi madre…
Olga echó un vistazo a Agustina. Parecía que al fin había caído rendida al sueño. El policía chistó con la lengua. Tenía tantas cosas en la cabeza en ese momento que había olvidado el motivo por el que le hizo llamar a su padre en primera instancia.
AGENTE SAÑUDO – Ah, es verdad… Oye, pues… da igual. Tú vete con ella, nosotros nos encargamos de él. No te preocupes. Dile a tu padre que lo llevamos a la comisaría 102 de Sheol para tomarle declaración. Que se pase él cuando pueda. Total, de ahí no se va a mover en todo el día.
OLGA – ¿No pueden…? Deja que se venga conmigo y con mi madre. Luego… cuando venga mi padre, él le puede llevar a la comisaría. Te juro que no vamos a…
AGENTE SAÑUDO – No. Esto funciona así. Lo que ha hecho tu hermano es demasiado grave. Con todos los testigos que había, y el cuerpo de esa mujer… Dios mío. Ya te digo, hoy no va a dormir en casa. Aún tiene suerte de ser menor de edad, porque si no… de esta se va a la cárcel de cabeza.
La chica de los pendientes de perla frunció el ceño y echó un vistazo a su hermano. Gustavo no parecía estar prestando la más mínima atención a la conversación. Su mirada se dirigía a un punto indeterminado del suelo, y su mandíbula inferior pendía inerte, resecándole la boca. Ya no portaba ni el carcaj ni el arco, aunque Olga no recordaba haberle visto desprenderse de ellos. Él era el más afectado por lo ocurrido, y aunque en cierto modo se sentía orgulloso de haber podido socorrer a su madre, aún no había sido capaz de comprender la envergadura ni las consecuencias que acarrearía su acción.
OLGA – Lo hizo en defensa propia.
AGENTE SAÑUDO – En defensa propia es cuando te están agrediendo a ti, no a terceros. Además, que lo que ha hecho tu hermano es muy gordo. Por el amor de Dios. ¿Tú no has visto cómo ha quedado esa mujer?
OLGA – ¿Y tú has visto cómo está mi madre? Si no hubiera hecho nada, ahora sería mi madre la que estaría muerta.
AGENTE SAÑUDO – Sí… Pero eso no lo justifica. Eso… Mira. No es conmigo con quien tienes que discutirlo. Yo sólo te digo lo que hay, y a tu hermano nos lo tenemos que llevar a la comisaría ahora mismo. A la 102. Que no se te olvide.
El policía se alejó de ella bruscamente. Olga se quedó sin palabras, y tan solo atinó a despedirse de su hermano dándole dos besos y diciéndole que todo saldría bien antes que aquél agente de policía se lo llevase esposado con unas bridas y le metiese, con bastante poca educación, en el coche de policía. La joven de los pendientes de perla se quedó mirando el coche a medida que éste salía del estadio, y acto seguido se acercó a la camilla en la que descansaba Agustina. Le peinó con los dedos su cabellera morena, y le dio un beso en la frente. En menos de cinco minutos ya estaban ambas de camino al hospital Shalom.
Morgan is coming. Intuyo que aunque sea de pasada o conversación cruzada se le verá.
Me gusta que los acontecimientos sigan una lógica. Mira que no podía esperar a saber más de Guillermo, pero esta historia me ha gustado y no me ha recordado al camionero que ayudó a Bárbara.
Muy interesante tu augurio, Gamab. Al fin y al cabo, están en Sheol, y efectivamente, la comisaría 102 es la comisaría en la que trabajaban Morgan y Rafael. Siempre me gusta ofrecer guiños que le den más empaque a la historia global, y hacer que todo fluya y se interconecte, aunque piensa que de sí o sí Morgan aparecerá igualmente en la parte del flashback de pasado septiembre, cuando acuda junto con Christian, Zoe y Bárbara al centro de refugiados en el que se conocieron.
Ya que puedo permitirme ofrecer muchos puntos de vista del inicio de la pandemia, narrando la historia individual de cada persona o pequeño colectivo que se adhiere al grupo, siempre gusto de dar alguna vuelta de tuerca más a la coherencia interna. Lo que de entrada ya nos parece lo más normal del mundo, que es deshacerse de un infectado, no deja de ser una herejía de proporciones épicas si lo trasladamos al mundo real previo ese cambio drástico en el imaginario colectivo, de modo que menor o no, Gustavo debe ser penalizado por su acción.
Aprovecho para anunciarte que aparte de la trilogía, que tendrá su cierre limpio propio, también tengo la intención de escribir un cuarto libro ambientado en este universo. En este caso se trata de una agrupación de relatos cortos que explicarán qué fue de muchos de los personajes que pasaron por la historia pero no trascendieron por uno u otro motivo, y así poder dar respuesta a todos los cabos sueltos que queden, que sin ser de importancia capital, pues todas las historias troncales de los personajes principales tendrán una resolución satisfactoria en la trilogía original, sí podrá ofrecer una nueva perspectiva de esos otros secundarios de los que se desconoció el destino. Y lo digo porque Lorenzo, el camionero que has mencionado en tu comentario, junto a su familia, es uno de los que tengo en la lista de relatos a incluir.
Y si te gusta escribir, sólo mencionarte también que tengo abierto un concurso en el blog para que los lectores podáis ofrecer vuestro propio relato corto para añadir al conjunto de ese otro libro, en este caso concerniente al personaje llamado Marina que Samuel menciona a Bárbara en un momento dado por radio. Las bases del concurso están en una de las pestañas superiores del blog. Todos cuantos leáis este comentario estáis más que invitados a participar.
La noche del viernes más y mejor. El siguiente capítulo narra qué fue de Gustavo inmediatamente después de que se lo llevaran embridado en el coche de policía. 🙂
¡Feliz San Juan!
David.
Si te digo la verdad, no tengo ningún interés en que Morgan vuelva (podéis apedrearme). Creo que salvo sorpresa monumental que haga tener coherencia a su vuelta prefiero quedarme con momentos como el de zoe en el avión pensando que había visto a Morgan zombie.
Respecto al 4 libro, me parece parece una gran noticia. Creo que en estos libros donde se crea un universo paralelo esa obsesión can cerrar todo no tiene tanto interés como el que algunos lectores querrán saber que fue de algunos personajes.
Me acabo de leer los requisitos para los relatos. Cuenta con él mío. Soy un ingeniero que también ha presentado el proyecto hace 2 semanas ;), por lo que escribir no es lo mio pero lo haré. Ahora bien, de entrada aviso que me voy a saltar un requisito 😀 vivo en Egipto y voy a basar el relato desde aquí y no en España.
Interesante planteamiento sobre la presencia de Morgan en la novela. Creo que eres el primero, lo cual no deja de ser relevante, por contraste. Creo que es el único spoiler relevante que se me escapó en su momento, y que he arrastrado desde entonces. En cierto modo es lógico, al menos el hecho que se le de respuesta a qué fue de él, aunque para ello bien podría estar en el libro anexo de relatos. Lo único que realmente deseo es que el cómo os sorprenda sobremanera. 🙂
La trilogía se cerrará limpia y satisfactoriamente (que os guste u os defraude es ya otra cosa, porque estoy convencido que habrá reacciones por ambos lados). Sin embargo, ese pequeño anexo me parecía interesante como ejercicio de despedida a un proyecto en el que llevo ya casi nueve años dedicado en cuerpo y alma, y como ejercicio personal para comedir la escritura. Forzarme a contar historias cortas y autoconclusivas es algo que para mi es un reto, porque como habréis sospechado… tengo facilidad por contar historias enfermizamente largas y con miles de interconexiones. Y hacerlo con esos personajes que pasaron de largo me pareció muy interesante, sobre todo para cerrar la historia más limpiamente y ofrecer un último bonus track a los fieles lectores que se hayan quedado con ganas de más.
También cabe contarte, lo cual confío pueda traducirse en una buena noticia para ti, lord Gamab, que tengo el firme propósito de escribir un nuevo libro, de aquí un tiempo, titulado «Al otro lado de la muerte», ambientado en este mismo universo, pero unos 15-25 años más adelante, cuyo inicio sea literalmente la muerte del último infectado de la tierra, y que narre las aventuras de uno de los supervivientes de esta trilogía, tras ese lapso de tiempo, en una nueva tierra en las posiblidades son prácticamente infinitas a la hora de imaginar cómo hayan podido evolucionar las sociedades, o todo lo contrario, qué aspecto lucen las ciudades abandonadas después de tanto tiempo, y sin zombies de por medio. Siempre me gusta describirlo como «el primer libro de zombies en el que no sale ni un solo zombie». xD
Halagado y encantado me encuentro de saberte interesado en participar en el concurso de relatos sobre el personaje de Marina. Enhorabuena por la entrega de tu proyecto. Yo soy Arquitecto, por lo cual las letras me pillan bastante de refilón por no decir que ni por asomo, pero con ganas e ilusión, se pueden conseguir grandes cosas. 🙂 Las normas están para saltárselas, y piensa que Samuel está más cerca de Egipto que de España, tal y como he planteado su posición geográfica, así que de lujo. Yo con que ambos hablen en español me conformaría. El libre albedrío para todo lo demás está en tu mano. Ya estoy deseando leerlo. 🙂
Por ahora, cuento con el primer relato en mi poder, el de Battysco AKA lady Sonia. En breve lo colgaré en el blog para que haga las delicias de todos vosotros. Sin duda lo vais a gozar leyéndolo, pero nunca tanto como lo hice yo. No tiene desperdicio y pone el listón muy alto. 😉
De aquí un triste cuarto de hora, nuevo capítulo. En esta ocasión Gustavo es el protagonista.
David.
Hay una diferencia entre saber lo que pasó y volver. Aun así, sin ánimo de ser ningún troll, ¿es realmente necesario cerrar todo con detalle sin dejar nada a la imaginación del lector?
Entiendo que lo correcto es no dejar cabos sueltos, pero también es correcto dejar cosas a la imaginación. Está claro que ha pasado mucho tiempo entre desaparición y aparición, pero no es lo mismo seguir la historia aquí por entregas que en libro donde todo estará mucho más reciente. Sin el detalle de Christian y como solo él conoce la verdad si vería interesante responder esa pregunta. Lo que me da miedo, es que se caiga en la ‘irrealidad’. Mi punto de vista sobre un libro de zombis es asumir no hacer preguntas sobre el motivo de tener zombis, pero el resto debe ser coherente. Esta trilogía me parece muy coherente y bien estructurada, realmente buena. Incluso es coherente el motivo de tener zombis!! Eso lleva a temer que venga un milagro y resuelva cosas mágicamente.
Ahora bien, lo realmente increíble es la oportunidad que nos brindas de opinar y esta interacción contigo. Aunque acabe de llegar, sin duda eso lleva la trilogía a otro nivel.
Respecto al relato, si por supuesto será en español, qué menos.
Bueno, ahora toca seguir con los gintonics y dejar de criticar 🙂
Sí es cierto que gran parte de la magia de la lectura es que el propio lector rellene los huecos que va dejando el autor con ideas e interconexiones de su cosecha, para que su experiencia sea personal y mucho más rica. Yo en más de una ocasión he cambiado incluso el nombre a los personajes de los libros que leía, porque no me gustaba cómo sonaban. xD Lo recuerdo especialmente en «El clan del oso cavernario», que los rebauticé casi a todos. A lo que iba… Si es cierto que caer en la tentación de ser demasiado exhaustivo y explicar tanto o más de lo que la propia historia exige puede ser un error, y si yo peco de algo, aunque no sea yo quien debe juzgarlo, es precisamente de eso. Aprendí no hace mucho que hay algo que se llama «curva de aprendizaje» que valora en una novela, la rapidez y la intensidad con la que se plantean nuevas tramas y se presentan nuevos personajes, de modo que si es muy pronunciada, el lector se puede saturar de tantos nombres y de tanta información y puede perder el interés por la lectura porque no se aclare (eso conozco a gente que le ha pasado con Canción de fuego y hielo). En mi caso es literalmente al contrario, mi curva de aprendizaje es prácticamente plana. De todos los integrantes del grupo, no me creo que llegue un momento que os preguntéis… ¿Hostia, y quién carajos era ese Juanjo? Le dedico tanto tiempo y tanto esfuerzo a cada personaje (personaje relevante en la trama), precisamente para que el lector pueda juzgarlo y quererlo u odiarlo, pero siempre desde el conocimiento de todo cuanto le rodea. Con Morgan… es que no quiero hacer ningún spoiler. xD Lo que sí puedo decir es que soy muy respetuoso con la inteligencia del lector, y un «pues esto es así porque me da a mi la gana, y si no te lo crees, es problema tuyo», es lo último que pretendo para con esta novela. Morgan no está muerto, ya te lo digo, y aparecerá de nuevo. El qué, el cómo, el por qué, y el cuánto… me lo reservo. Y si te soy sincero, el hecho que os parezca irreal o sacado de la manga, es lo último que me preocupa. Y no porque no le de importancia a ese hecho, sino porque estoy tan convencido de que lo que quiero contar tiene sentido (y además mola, y mucho xD), que lo que más me preocupa es conseguir sorprenderos. Si llegado el momento no me lo compras, dímelo abiertamente, porque habré errado en mi pronóstico. Morgan tendrá flashback, pero no será excesivamente largo, y generará el salto habitual. Reencuentro, receta, flashback hasta el momento actual y continuación. Gracias por comentar y por tu iniciativa de participar en el concurso. 🙂
David.
A Gamab no se le escapa ni una! En breve volveremos a saber de Morgan.
Reconozco que no les tenía especial cariño a los personajes de Olga y Gustavo, la verdad, y tampoco sé por qué. Les he guardado indiferencia todo este tiempo. Me gusta pensar que después de su flashback mi interés hacia ellos pueda dar un vuelco.
Yo ya tengo listo mi mini relato. Cuando me digas, te lo envío.
Saludos,
Sonia.
De Morgan volveréis a saber de sí o sí, tanto en flashback como en continuación de trama. Es una de las grandes apuestas del tercer tomo. 😉
Comenté en una ocasión que estos dos personajes no tenían visos a ser rescatados en la trama troncal, si un caso en el libro de relatos, aunque he de reconocer que desde que les ideé y les integré en la historia en el primer tomo, me gustaron mucho y me dio rabia deshacerme de ellos tan rápido, porque me hubiese gustado darles continuidad. Pero un día vi la luz, al darme cuenta que rescatándolos podía al mismo tiempo conseguir darles una historia individual y una continuidad que en su momento eché de menos, y solucionar el gravísimo problema de dar coherencia a que Bárbara y su hermano se reencontrasen, al que llevaba años dando vueltas. Confío que el flashback te haga hacértelos más tuyos y les veas con mejores ojos. Yo les tengo muchas ganas. Justo ahora tengo preparado para escribir un nuevo capítulo suyo.
Me alegra sobremanera saber que tienes preparado el relato de Marina. 😀 Envíamelo tan pronto puedas, que estoy excepcionalmente interesado en leerlo. Y si me das permiso, lo incluiré en la sección correspondiente en el blog para que los demás lectores puedan también leerlo, y lo anunciaré en twitter. Las votaciones no las abriré hasta que se cierre el período de entrega de relatos, para que todos juguéis con las mismas cartas, pero me parece bien ir colgándolos a medida que vais escribiéndolos. 🙂
David.
Hay, cuanto hecho de menos a Morgan… 😉 ahora me podré quitar el gusanillo ese,de saber algo más de el xD!!
Super!! Sonia!! Qué bien que lo hayas terminado!! Y seguro,seguro que será bastante bueno 😃
Impaciente estoy ya, jejeje.
Saludos.
Betty
David ya lo leyó!!! Pronto lo podréis hacer vosotros también.
Un besito pa to el mundo.
Feliz finde.
Sonia.
Ya tengo 3/4 partes revisadas, y en breve te lo devolveré para que lo juzgues y podamos ponerlo a disposición del resto de lectores. Tú abrirás el concurso. 🙂
David.
Muy bien David, para bien o para mal que así sea.
Si, y según su opinión es… Pero qué muy bueno 😉!!
Mis felicitaciones anticipadas!!
Saludos lo mismo te deseo!!
Betty